Las encías inflamadas representan la primera fase de la enfermedad periodontal, una condición totalmente prevenible si se tiene una higiene bucal adecuada.
Tener las encías rojas es solo uno de los síntomas que pueden ayudarte a identificarla. Si aún no sabes cómo reconocer y prevenir encías inflamadas, revisa este artículo.
¿Cómo identificarlas? | ¿Cómo se ven las encías cuando están inflamadas?
En condiciones normales, las encías son de color rosa pálido, firmes, y no son dolorosas ni sangran. Al estar inflamadas o hinchadas, pasan a estar enrojecidas, de un color rojo más intenso o violáceo, y se asocian otros síntomas como dolor y sangrado con facilidad, sobre todo al comer, cepillarse o utilizar hilo dental.
Otros síntomas asociados a las encías inflamadas
El enrojecimiento, dolor y sangrado de las encías, son los síntomas más comunes e idenficables a simple vista.
También pueden asociarse a la inflamación de las encías, los siguientes síntomas:
- Halitosis o mal aliento
- Retracción de la encía
- Sensibilidad dental
- Sensación de movilidad en los dientes
- Oscurecimiento de los dientes
Causas | Principales causas de la inflamación de las encías
Existen diversas causas por las cuales las encías pueden inflamarse, sin embargo, la principal y más importante es la mala higiene oral, pues condiciona la acumulación de bacterias en el espacio que existe entre la base del diente y la encía.
Esta acumulación de bacterias se conoce como placa bacteriana, y con el tiempo, puede endurecerse bajo la línea de las encías y provocar la formación de depósitos o sarro, que inflama las encías y produce un tipo de enfermedad periodontal leve llamada gingivitis.
Si la gingivitis no se trata oportunamente, progresa a una forma más grave: la periodontitis.
En esta, el sarro forma las llamadas bolsas periodontales, y las bacterias que allí se encuentran pueden destruir progresivamente los tejidos alrededor, pudiendo ocasionar pérdida de dientes y ameritando evaluación por un periodoncista.
Otras posibles causas de encías inflamadas son:
Déficit nutricional
Como la falta de vitamina B, C o hierro. El déficit de vitamina C, por ejemplo, produce escorbuto, una enfermedad asociada a inflamación de las encías.
Consumo de tabaco
Los fumadores son más susceptibles a padecer de enfermedad periodontal, debido a que los componentes del cigarrillo disminuyen la capacidad protectora de las encías frente a la placa dental.
En estos pacientes, las encías suelen tener un color más pálido de lo normal, enmascarando una posible infección y retrasando el diagnóstico.
Infecciones
Algunos microorganismos como virus, hongos y bacterias, pueden producir infecciones que compromentan las encías, como por ejemplo la candidiasis oral y los abscesos que surgen como complicación de las caries dentales.
Cambios hormonales
En algunas etapas donde existen cambios hormonales importantes, como la pubertad, el ciclo menstrual, embarazo o menopausia, la sensibilidad de las encías puede aumentar y con ello, el riesgo de padecer de gingitivis.
Uso de fármacos
Existen medicamentos que pueden promover la inflamación gingival a través de distintos mecanismos, como es el caso de algunos anticonvulsivantes, inmunosupresores y antihipertensivos.
Además, ciertos antidepresivos reducen la secreción de saliva, propiciando la inflamación de las encías.
Uso de aparatos dentales de ortodoncia
El uso de ortodoncia, implantes dentales o dentaduras dificulta la higiene dental, promoviendo la formación de placa, y también produce irritación de las encías.
Reacciones adversas a la pasta dental o el enjuague bucal
Algunos productos como pastas dentales, enjuagues o colutorios pueden ocasionar sensibilidad o alergia e inflamar las encías.
Consejos para prevenir | 7 consejos para prevenir la inflamación de las encías
La mejor manera de prevenir la acumulación de placa bacteriana y por ende, la inflamación de las encías, es mantener una adecuada salud bucal.
Para ello, es fundamental tener una buena rutina de higiene bucodental en casa y acudir periódicamente al odontólogo para revisión y realización de una limpieza profesional.
Crea una buena rutina de higiene bucal en casa
Una buena técnica de cepillado, utilizando un cepillo de cerdas suaves y cabezal pequeño, o uno eléctrico durante dos minutos después de cada comida, el uso de hilo dental diario para limpiar en las zonas donde el cepillo no puede llegar, y la incorporación de enjuague bucal antimicrobiano son esenciales para tener encías sanas.
Cambia tu cepillo dental cada 3 meses
Un cepillo dental desgastado no elimina las bacterias y restos de alimentos de forma adecuada, por lo que se comienda cambiarlo cada tres meses.
Mantente hidratado
Una buena hidratación permite tener una cantidad de saliva necesaria para reducir las bacterias y evitar la sequedad de la boca, previniendo las enfermedades de las encías.
Mantén una dieta balanceada
Es recomendable no solo mantener una dieta equilibrada y rica en frutas y verduras, sino también reducir el consumo de azúcar y bebidas oscuras como los refrescos.
Evita fumar
Los fumadores son más susceptibles a padecer de encías inflamadas.
Además, en estos pacientes suele retrasarse el diagnóstico y los tratamientos no son tan efectivos como en personas sin este hábito.
Realiza visitas periódicas al odontólogo
Para el cuidado bucal también es fundamental realizarse revisiones y limpiezas dentales de forma periódica, y con ello evitar las enfermedades de las encías.
Puedes acudir a la clínica dental cada 6 meses, dependiendo de las indicaciones del odontólogo.
En el caso de que presentes periodontitis, deberá evaluarte especialista en periodoncia para definir el tratamiento adecuado según la progresión del caso, como por ejemplo, un raspado para eliminar la placa.
Presta atención a los productos que utilizas para la higiene bucal
En vista de que algunas pastas dentales y enjuagues bucales pueden irritar las encías, es importante que estés atento a síntomas desencadenados por el uso de nuevos productos.
Si bien existen algunos remedios caseros recomendados para disminuir o prevenir la inflamación de las encías, siempre será mejor visitar a un profesional si se tienen síntomas de inflamación de las encías, para procurar tener un tratamiento médico oportuno.
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Lorena es licenciada en Cirugía Dental egresada de la Universidad Autónoma de Guadalajara. Cuenta con más de 28 años de experiencia en odontología y con especialidades en odontopediatría y ortodoncia. Co-autora de dos libros, ponente en diversos foros académicos dentales y Secretaria Académica en la Universidad Latinoamericana desde hace 10 años.